¿Los Matan otros Hombres?

Probablemente esta frase tenga un inexorable efecto deja vu en usted. ¿Cuántas veces vimos el debate de los femicidios y la violencia de género caer en ese pozo?

Quizás usted cree que esto no merece mucho análísis, que la respuesta "a los hombres los matan otros hombres", o es un Knock-Out para cualquier planteo del homicidio como problema de género para los hombres, o es una nimiedad que no tiene implicación alguna.

Sea como sea creo que aprenderemos algo interesante analizando este punto del debate tan visitado y dilucidando qué clase de pensamiento se esconde detrás de él. Para eso continuamos la serie "Preguntas Políticamente Incorrectas pero Intelectualmente Necesarias", aunque esta vez será una lectura más breve y ágil.

Primero comencemos diciendo lo básico: A los hombres los matan otros hombres es un dato fáctico simplificado. En efecto, así como la mayoría de las víctimas de homicidio son hombres, a nivel mundial más del 90% de los condenados por este crimen también lo son:

Estudio M

undial Sobre e

l Homicidio,

Resumen ejecutivo, UNODC (2013)

También las lesiones por agresiones en general tienen la misma tendencia:

Geneva, W. H. O., & World Health Organization. (2008). The global burden of disease: 2004 update. (PÁGINA 59)

¿Qué podemos deducir de esto?

Todo depende de con qué tipo de lente usted tienda a analizar las problemáticas sociales. Sin dudas mucha gente lo encuentra como una respuesta convincente y he visto masculinistas pasar por dificultades a la hora de responder. Veamos, existen dos aspectos a contemplar:

1. Científico: Dilucidar cómo se manifiesta la violencia y cuáles serían las causas.
2. Moral, o ético: ¿Qué determina la gravedad de este fenómeno?

Partiendo del aspecto (1), creo que meter todo tipo de violencia en una misma bolsa, considerar a la violencia como un fenómeno unidimensional, es un error de análisis fatal. En esto el Feminismo tiene una buena respuesta al dato de los hombres como mayoría de las víctimas de homicidio en general, cuando se lo intenta comparar con las mujeres víctimas de homicidio por violencia íntima. No se puede pretender que dos fenómenos disímiles entre sí se pueden poner a la par, lo que se le dice mezclar peras con manzanas.

Sin embargo en el aspecto (2) no entiendo cómo esto no es un dato que llama la atención. ¿Acaso hay alguien que no puede ver una asimetría significativa, y preocupante, en lo que respecta al riesgo de sufrir una muerte violenta?

Y aquí es donde el argumento del título aparece, y volvemos a (1). La violencia sufrida por hombres no puede tener una motivación de género si no es a mano de mujeres, aparentemente ese sería el razonamiento subyacente. Lo cual siempre me pareció un sinsentido, ya que si yo (siendo hombre) tuviera una preferencia por agredir hombres antes que mujeres, o una aversión a la acción de agredir mujeres que desaparece si ante mí tengo alguien de mi propio sexo, pues resulta que tengo una tendencia sexista en lo que respecta a la violencia. Puedo no agredir individuos de mi mismo sexo "por que son hombres", pero nadie puede negar que si mis congéneres comparten esos valores, a factores que generan violencia, a nivel social vamos a verla canalizarse mayoritariamente hacia el sexo masculino. Y tenemos lo que se debería denominar un problema de género. Si alguien cree que la explicación es hombres violentos matándose entre ellos, si bien creo que es un factor relevante no logra demasiado peso explicativo:

Fleitas Ortiz de Rozas, D., & Otamendi, A. (2012). Mapa de la violencia de género en Argentina. Asociación para Políticas Públicas. Documento de trabajo.

Ya desde la temprana infancia y en la vejez se observa una gran diferencia. También, en una de las ciudades más violentas del planeta como es Juárez, apenas de la mitad de ese 90% de víctimas que son masculinas estaban involucradas en el principal factor delictivo que es el narcotráfico:

“Yendo en relativa contracorriente de los estereotipos de género, sólo 51% del total de los asesinatos fueron clasificados como relacionados con el narcotráfico, incluyendo a cinco de las mujeres victimadas.”

Aún cuando fuera una cuestión de "se matan entre ellos", no me imagino cómo podemos disminuir la importancia de tal circunstancia (sobre el argumento de la desventaja física de un sexo para defenderse de las agresiones, lo mismo aplica a la hora de agredir individuos más pequeños o débiles). También les sucede a afrodescendientes estadounidenses: Sufren horripilantes tasas de homicidios a manos de sus congéneres étnicos ¿Acaso no es un problema que debería concerner a cualquier estadounidense promedio? Yo creo que sí.

Se estima que La Guerra de la Triple Alianza de 1870 diezmó horrorosamente a la población masculina en Paraguay. 

Pienso que el hecho de compartir una sociedad, y una identidad regional, ya nos pone en cierta cercanía moral. Afrodescendientes y caucásicos de Estados Unidos comparten una identidad nacional, pero suelen vivir en regiones separadas y rara vez comparten lazos familiares profundos. Mujeres y hombres sí compartimos esos lazos, desde la cuna hasta la muerte, y a pesar de cierta distancia estamos fusionados en una misma unidad social. Tenemos motivos extra y por eso deberíamos compartir una preocupación mutua.

Además, ¿Por qué nos es más importante señalar un sexo victimario, cuando se supone que lo que en realidad nos mueve es la compasión por las víctimas?

El marco de pensamiento que le da tanta relevancia al hecho de que los hombres mueran a manos de otros de su mismo sexo comparte ciertas similitudes con el pensamiento tribal, aplicado a las cuestiones de género. Más bien, como plantea uno de los libros más interesantes que tuve el deleite de leer, el pensamiento de clanes. Estudia la historia de las transformaciones sociales entre el Paleolítico y el Neolítico, enriquecida por el estudio antropológico de algunas culturas que conservan características de esos tiempos, y nos da una imagen del pensamiento social de los clanes muy parecida al Feminismo moderno. Ejemplo: Tenemos dos clanes, A y B, cualquier cosa que haga un individuo del clan A a un individuo del clan B es una ofensa entre clanes que debe zanjarse involucrando a los dos grupos completos. Pensamiento grupal extremo, aislamiento y división entre grupos.

Pocas cosas son tan lamentables como cuando algún hombre feminista sale a pedir perdón por que "matamos a las mujeres todos los días", la constante propaganda que busca un arrepentimiento en los hombres por algo que no hacen ni el 0.01% de sus individuos. Es penoso por que esta ideología atormenta la conciencia de hombres inocentes, incentiva un miedo desmedido entre mujeres, y genera más tensiones entre sexos. Es hora de que dejemos atrás estas arcaicas maneras de pensar. Es hora de, como dije muchas veces y no me canso de repetir, terminar para siempre con la mentalidad "Equipo de los Hombres vs Equipo de las Mujeres". Sólo aprendiendo una compasión y una empatía mutuas entre géneros, una genuina que no ignore problemas de los hombres, sólo así lo vamos a poder hacer.

Escrito por (Æ)